Vuelve el tío de la gorra de béisbol a batear, ahora con su fuerza dirigida al sistema sanitario estadounidense. Un nuevo documental se prepara y los afectados ya están curándose en salud previniéndose de las posibles cámaras ocultas de l’enfant terrible americano.
Si con Bowling for Columbine puso en pie de guerra a la industria armamentística estadounidense y con Fahrenheit 9/11 al propio Bush,ahora más de uno va a tener que ser ingresado de urgencia ya que los documentales de Moore son los más vistos de la historia.
Los detractores del descamisado y desaliñado director hablan del desequilibrio en el tratamiento de la realidad que se manipula negativamente.
Por otro lado,tampoco Bush puede andar tranquilo ya que este proyecto no significa que haya abandonado el de Fahrenheit 9/11 y medio en el que se propone seguir al presidente en su segundo mandato. Además seguro que con las críticas al sistema sanitario tiene algo que decir de la administración republicana.