Cuando nos reunimos con Jennifer se muestra ilusionada por su nominación a los Goya como mejor actriz revelación (un premio que acabaría llevándose María León), orgullosa por su nuevo trabajo, Extraterrestre, y expectante por su próximo proyecto, una serie sobre Isabel la Católica.
No es el caso de Extraterrestre, tu nueva película, que si llama a atención por algo es por su originalidad.
Me pasó con Cronocrimenes. Recuerdo que pensé, “esto sí que no lo he visto antes”. Cuando leí el guión de Extraterrestre tuve la misma sensación, de estar ante algo totalmente nuevo. Creo que es algo que tiene Nacho Vigalondo, que hace cosas diferentes en un momento en el que es muy difícil innovar.
Informándome sobre tu carrera en Internet he leído cosas de lo más variopintas, como por ejemplo que trabajaste en la serie inglesa para adolescentes S Club Seven…
(Risas) Es cierto, pero solo salía en una secuencia. Era un capítulo en el que los protagonistas iban a Barcelona y yo pasaba por ahí, pero era una niña, tenía 14 años. De todas formas he leído cada cosa sobre mí en Internet… En Wikipedia decían que mi auténtico nombre era Francisca, algo que han llegado a preguntarme en entrevistas.
Otra cosa que he visto en Internet es que has sido portada en diferentes publicaciones como FHM o MAN, ¿Es incompatible ser una actriz seria que recoge galardones y hace cine de calidad con la actriz sexy que posa en revistas masculinas?
He posado hace años, son cosas que igual hoy en día no haría. De hecho me las siguen proponiendo y digo que no. Pero tampoco me arrepiento de nada, todas las fotos que me han hecho han sido siempre fotos bonitas, con fotógrafos que he conocido y no he visto nada malo en ellas. No creo que tenga que ver eso con mi carrera. Es simplemente mostrar otra parte de mi distinta, otra faceta. Me apetecía decir “también tengo un cuerpo”, tampoco voy a ir con un burka por la vida.
De hecho tienes muchas facetas, una de ellas es la de dobladora de cine, una profesión que te viene de familia (su padre fue el famoso doblador Miguel Ángel Jenner) ¿es muy diferente preparase un papel para interpretarlo o para doblarlo?
Es diferente la preparación porque cuando estás doblando no tienes que ensayar con días de antelación. Pero no deja de ser una forma de interpretación, aunque solo prestes la voz estás actuando. Y la verdad es que me ha enseñado mucho ser dobladora para después ser actriz, porque estás viendo una y otra vez una escena, analizando la manera de interpretar de otros.
Emma Whatson, la actriz que interpretó a Hermione en Harry Potter dijo sentirse vacía cuando terminó la saga, me imagino que para ti habrá sido menos traumático dejar de doblarla…
(Risas) No fue traumático, no me iba con la varita a mi casa después de doblar. En ese sentido no soy una dobladora de método. Me dio pena porque era un personaje que me gustaba doblar. Me hacía ilusión, me gustaban mucho las películas. Además empecé muy pequeña y fui creciendo con ella.