Su avance es imparable. De cada "meteorito" surgen tres naves (diseñadas por Albert Nozaki inspirándose en la figura del pez manta raya) que disparan potentes rayos caloríficos y magnéticos. Clayton y Sylvia quedan atrapados en una granja. Allí resisten a los invasores, creados por Wally Westmore y apenas entrevistos, y logran hacerse incluso con muestras de su sangre y su tecnología de visión -deudora de la tv en color-, que comparten con sus colegas del Instituto de Ciencia y Tecnología de Los Ángeles.
Aunque los alienígenas no cuestionan la importancia de Gran Bretaña, es Washington, "el único punto estratégico que no ha sido atacado", de donde emanan las decisiones que pueden salvar a la humanidad. Y Washington decide arrojar sobre los marcianos próximos a Los Ángeles una bomba atómica "diez veces superior a cualquier cosa lanzada hasta la fecha". Millones de personas se congregan en las colinas cercanas para contemplar el acontecimiento sin ninguna protección, "esperando para ver si pueden volver a sus hogares". Pero los extraterrestres superan la prueba y se precipitan sobre Hollywood.
Escenas de inserto, o rescatadas de Cuando los mundos chocan: animales huyendo del bosque, masas humanas escapando de la urbe. Los científicos del Instituto pretenden también abandonar Los Ángeles: llevan consigo las muestras y los hallazgos que permitirán combatir a los marcianos. Pero la turba enloquecida se hace con sus medios de transporte y separa a Clayton de Sylvia y los demás. El joven recorre las calles desiertas de la ciudad, buscando en las iglesias a su amada. Los invasores le pisan los talones destruyendo los depósitos de agua, el ayuntamiento...
El reencuentro de Clayton y Sylvia coincide con el derrumbe de una nave alienígena frente al templo. Suenan las campanas. Coros celestiales. ¿Qué ha pasado? La voz de Hardwicke lo resume: Los marcianos no resistieron las bacterias de nuestra atmósfera [...] Una vez que los esfuerzos de los hombres fracasaron, los marcianos fueron destruidos gracias a las criaturas minúsculas que Dios había puesto en la Tierra. The End.