Cada vez resulta más fácil encontrar ejemplos de cine enmarcado dentro de la temática “pupilo descarriado-profesor enrollado que le muestra el camino a seguir” que ya es considerado un género en sí mismo.
En los 90, El club de los poetas muertos de Peter Weir marcó un antes y un después en esta clase de cine, haciendo imperecedera la frase acuñada por Robin Williams “oh capitán mi capitán”. Más recientemente nos ha llegado Los chicos del coro y hasta Beyoncé quiso aprender francés -no lográndolo- destrozando con ello su banda sonora en la pasada edición de los oscar.
El estreno de esta semana se acerca más a El milagro de Candeal de Fernando Trueba, puesto que combina la realidad social de un país latino con la búsqueda de esperanza a través de la música.
“Maroa es una niña de once años que malvive en Caracas. El encuentro con Joaquín(Tristán Ulloa) profesor español de música que da clases en un reformatorio, le ayudará a salir de la miseria en la que vive.
Es sin duda significativo que la plasmación de la realidad social que plantea esta coproducción nos resulte bastante alejada de la realidad. Una de las razones es que la narración avanza a trompicones, dando la sensación de que nos hemos perdido algo. Su director no dedica muchos esfuerzos en recrear el proceso de aprendizaje (lo más importante en el género) pasando de puntillas por él, dándonos a entender que cualquiera puede tocar el clarinete en cuestión de horas. Además, la historia necesitaba de un análisis más profundo de la realidad del país, aquí expuesto a modo de apunte anecdótico.
No obstante, destacamos el buen hacer de nuestro Tristán Ulloa que hace lo que puede para dar credibilidad a su personaje del que no sabemos absolutamente nada. La niña que da nombre al título está sacada de las mismísimas calles de Caracas pero se mueve como pez en el agua delante de las cámaras. La relación profesor alumna convence al espectador aunque el final se antoje demasiado bonito para ser verdad, algo que por otro lado proporciona esperanza después de tanta miseria.