Han sido muchos los actores que a lo largo de la historia del cine han encarnado a Napoleón Bonaparte (1769-1821), el oficial de artillería que llegó a hacer de Europa un único Imperio bajo su mando. Una figura histórica controvertida, que para unos subvirtió los principios de la Revolución Francesa y para otros fue un precursor en la idea de un continente sin fronteras.
Sin embargo, con la excepción de Napoleón (Abel Gance, 1925), película con Albert Dieudonné en el papel principal y mítica gracias a sus innovaciones visuales, las hazañas de Bonaparte no han tenido brillantes correlatos cinematográficos. Ello no ha sido óbice para que intérpretes tan célebres como Emile Drain, Paul Muni, Jean-Louis Barrault, Charles Boyer, Marlon Brando, Herbert Lom, Christian Clavier o Ian Holm hayan sucumbido, en algunos casos más de una vez, a la megalomanía implícita en el personaje, por lo general en producciones más pendientes del romanticismo y la épica que de la realidad.
Curiosamente es un bio-pic de Napoleón no realizado, el que se propuso Stanley Kubrick una vez estrenada 2001: Una Odisea del Espacio (1968) y que nunca pudo concretar, el que más interés ha despertado entre los cinéfilos. El guión del filme fue encontrado en un archivo de la United Artists hace pocos años, y ha sido analizado en internet a menudo.
Ahora, es el gran actor francés Daniel Auteuil quien se atreve a abordar al emperador, en un proyecto que adapta N. , novela del escritor italiano Ernesto Ferrero que ganó el Premio Strega en el año de su publicación, 2000, y fue editada meses después en España por Tusquets.
N. recrea los trescientos días que desde mayo de 1814 pasó Napoleón como exiliado en la isla de Elba tras la derrota de sus tropas en Leipzig, la invasión de Francia y su abdicación. La vida de Bonaparte en el lugar es contada a través de las memorias de Martino Acquabona, erudito y librepensador que es nombrado bibliotecario del estadista.
La película, que comenzará a rodarse el 28 de agosto en Elba y la Toscana y se estrenará en 2006, estará protagonizada también por Monica Bellucci y Elio Germano. Su director, Paolo Virzi, consiguió en 1996 el David de Donatello a la mejor película por Vacaciones de verano y en 1997 el Gran Premio Especial del Jurado en el Festival de Venecia por Ovosodo. Filmes a los que hay que sumar La bella vita (1994), Besos y abrazos (1999) y Mi nombre es Tanino (2002).
Sobre Daniel Auteuil
Hablamos sin duda del intérprete más respetado y versátil del actual cine francés. Hijo de un cantante de ópera, Daniel nace en 1950 y pasa la infancia entre bambalinas. Se desenvuelve como tenor y actor teatral desde los diecisiete años, y se consolida en la última faceta con Godspell (1972), La loca de Chaillot (1973), Apprends moi Celine (1976) y Coup de chapeau (1979), obra con la que obtiene el galardón Gérard-Philippe al mejor actor joven del año.
En esa época ya ha empezado a interpretar pequeños papeles en el cine. Rueda a las órdenes de Bob Swain, Claude Zizi, Claude Lelouch, Gérard Lauzier o Edouard Molinaro multitud de comedias y cintas costumbristas hasta que en 1986 su talento explota en El manantial de la colina y La venganza de Manon, saga rural de Claude Berri. Su interpretación de Ugolin Soubeyran procura a Auteuil su primer César al mejor actor y el premio de la Academia Británica al mejor secundario.
Desde entonces, hemos podido disfrutar de su talento en Mi estación preferida, Los ladrones, Salir del armario, El adversario, Usted primero o la excelente 36 Quai des Orfebres -aún inédita en España-. Atesora ya una filmografía de unos sesenta títulos, que ha seguido conjugando con intensas experiencias teatrales como Woyzeck (1993) o La habitación azul (1999).
Auteuil consiguió su segundo César en el año 2000 por La chica del puente (1999), y ha sido nominado para el mismo premio en otras diez ocasiones. El Festival de Cannes le consideró el mejor actor en su edición de 1996 por El octavo día. Y por Un corazón en invierno (1992) recibió el David di Donatello al mejor actor extranjero, así como el Premio del Cine Europeo en la misma categoría. Auteuil ha sido galardonado hasta en España: los Premios Sant Jordi estimaron sus trabajos en La viuda de Saint-Pierre (2000) y La chica del puente como los mejores de un actor extranjero entre todas las películas estrenadas en nuestro país a lo largo de 2001.
Si hay alguien capaz de hacer verosímil a Napoleón en la pantalla, es Daniel Auteuil.