Después de siete años en los que Paramount se ha ocupado de distribuir sus producciones, el estudio DreamWorks Animation (sagas Shrek, Madagascar y Kung Fu Panda) ha decidido no renovar el acuerdo con aquella compañía y buscar otra que impulsase con más compromiso sus películas.
Aunque en principio parecía que esa compañía sería Sony, finalmente ha sido Fox con la que se ha llegado a un acuerdo. Los ejecutivos de esta última han asegurado a los de DreamWorks Animation que la distribución por canales digitales será una prioridad para ellos, algo que en estos tiempos resulta obligado aunque Hollywood siga resistiéndose a apostar del todo por ese medio.
La duda que queda a los analistas se centra en el papel de Blue Sky Studios, el estudio de animación que Fox ya poseía, responsable de otra franquicia de éxito, Ice Age. Se especula con que el directivo de DreamWorks Animation Jeffrey Katzenberg siga dirigiéndolo y, además, controle Blue Sky.