Pueden gustar más o menos. Pero si algo no se le puede discutir a sagas como Kill Bill o The Matrix es la calidad de sus secuencias de lucha. Y todas ellas se deben al mismo hombre: Yuen Woo-ping, especialista y coreógrafo de acción chino cuya celebridad en Asia ha acabado procurándole también créditos como actor y hasta como director, en films como El ojo del tigre (1990) y El último héroe en China (1993).
Para Woo-ping (en la imagen) ha llegado por fin el momento de debutar a nivel global. Y la película que ha elegido para ello es Vigilantes - The Lost Order, co-producción entre China y Canadá que distribuirá internacionalmente Hollywood y que contará entre sus principales intérpretes con actores estadounidenses. El proyecto pretende ser el inicio de una trilogía.
Vigilantes - The Lost Order ha sido definida como un cruce, por improbable que pueda sonar, entre la citada Matrix y Wall Street, siendo su protagonista una asesina profesional que, tratando de vengar la muerte de su padre, se topa con una siniestra conspiración que pretende desequilibrar la economía mundial.