Mientras Steven Spielberg prepara la versión cinematográfica de su segunda novela, Robopocalypse, Daniel H. Wilson ya ha vendido los derechos para la gran pantalla de la tercera, Amped.
Wilson, que conjuga el periodismo con la ingeniería robótica, está desarrollando lógicamente todas sus ficciones en el ámbito de la ciencia ficción. Amped no es una excepción, pues cuenta cómo en un futuro cercano los seres humanos disponen de la posibilidad de implantar en su cuerpo diminutos artefactos que les hacen disfrutar de superpoderes. Pero ello, como sucede en el universo X-Men, empieza a hacerlos diferentes de los seres humanos “clásicos”, que pasan a temerles.
Será Working Title el estudio que se haga cargo de la correspondiente película, cuyo director será Alex Proyas (en la imagen), auténtico especialista en el género: Dark City (1998), Yo, Robot (2004), Señales del Futuro (2009)… El nombre de Proyas se encuentra ligado hoy por hoy a la serie también fantástica Evolve y a otro proyecto fílmico del mismo género: The Unpleasant Profession of Jonathan Hoag (2013).