Los autores del cómic sobre las Teenage Mutant Ninja Turtles, Kevin Eastman y Peter Laird, andan a la greña. El motivo: como ya sabrán nuestros lectores, la creación de ambos, que ha dado lugar desde 1984 a una exitosa franquicia multimedia, generará una nueva película a estrenar en mayo de 2014, Ninja Turtles. Una película que producirá Michael Bay y dirigirá Jonathan Liebesman y que, a la vista de las noticias aparecidas sucesivamente, no sabe muy bien todavía qué rumbo artístico seguir.
Recordemos que Bay ya sembró la alarma entre los fans de las Tortugas Ninja al afirmar que las de la próxima película no serían ni adolescentes ni mutantes, que su origen sería expresamente alienígena. Después se filtraron versiones del guión decepcionantes para los internautas y se propagaron rumores sobre problemas con el presupuesto…
Lo más grave: Peter Laird, lógicamente una opinión cualificada sobre las Tortugas Ninja, ha manifestado su discrepancia y enfado por el rumbo hacia donde están llevando su creación Bay y Liebesman. Quizás para contribuir a extender una buena imagen sobre el proyecto, desdiciendo de paso a Laird y sorprendiendo a todo el mundo, Kevin Eastman acaba de declarar con entusiasmo que la película tendrá un tono grave (deudor obviamente de la influencia de los Batman de Christopher Nolan), épico (aportando como influencias expresas para ello Los Vengadores y The Raid) y de fotorrealismo digital (ahora remitiéndose a El origen del planeta de los simios).
Pero las palabras de Eastman, lejos de de aportar confianza a Ninja Turtles de cara al público, no han hecho otra cosa que sembrar las dudas y hasta la ironía en Hollywood: ¿Las Tortugas Ninja en plan Batman y Los Vengadores? Todo es posible… o no.