Quizás porque ha acabado harto él mismo del dramático registro en el que se habían movido hasta la fecha todos sus films (Amores perros, 21 gramos, Babel y Biutiful), o porque no ha logrado sacar adelante en los dos últimos años ningún proyecto similar (entre ellos, un western que pretendía protagonizase Leonardo DiCaprio), el director mexicano Alejandro González Iñárritu cambia radicalmente de registro en su próxima película.
Y es que Iñárritu (en la imagen) dirigirá una producción de bajo presupuesto titulada Birdman, que ha escrito él mismo en colaboración con Nicolas Giacobone, Alexander Dinelaris y Armando Bo, y que será una comedia en toda regla.
Birdman relatará las andanzas de un actor antaño conocido por su encarnación de un superhéroe cinematográfico, que en su decadencia quiere reclamar su fama pasada entrometiéndose en el montaje de la versión teatral de la cinta que le lanzó al estrellato.
Birdman se rodará en todo caso atendiendo al estilo frenético y naturalista de Iñárritu, ambientando su acción en solo tres días de la vida del protagonista.