El director británico Ridley Scott (Blade Runner, Gladiator) parece haber digerido ya anímicamente el suicidio de su hermano Tony. Aunque Scott (en la imagen) detuvo por ese motivo la producción del thriller The Counselor, ha vuelto a toda máquina a ella y, apenas la termine, consagrará sus talentos a otra producción.
Esta vez, para la televisión, medio que Ridley Scott ha frecuentado como productor pero en el que no ejerce como realizador desde que en 1969 firmase un episodio de The Troublemakers. Pero Scott parece haber encontrado muy apetecible el argumento de una serie de intriga titulada The Vatican.
The Vatican, creada y escrita en sus primeros estadios por Paul Attanasio (Quiz Show, Donnie Brasco), pretende ser una reflexión sobre "la espiritualidad, el poder y la política", aspectos que Scott ha abordado en títulos como El reino de los cielos, Red de mentiras o la reciente Prometheus.