La crisis económica en general y en el cine en particular es tan profunda, que éxitos considerados antaño normales, indignos de ser prorrogados, se convierten hoy en valores seguros por los que continuar apostando hasta exprimirlos.
La semana pasada os comentábamos que Universal Pictures iba a volcarse con las secuelas de cara a la temporada 2013-2014, incluso de films tan faltos de pretensiones e impacto global como Dando la nota. Pues bien, Sony y DreamWorks siguen la estela de Universal, dando luz verde a continuaciones de películas cuyo éxito solo puede calificarse de moderado. Las secuelas nunca han faltado en Hollywood, pero nunca su planteamiento ha sido tan precario como ahora.
Sony insistirá con Infiltrados en clase 2, que prorrogará las cómicas aventuras de los policías infiltrados que encarnasen en el film original Jonah Hill y Channing Tatum. Ya en marzo de 2012, antes del estreno del film original, se supo que el propio Hill y Michael Bacall estaban enfrascados en el guión de una continuación, pero todo dependía del rendimiento económico definitivo de la primera película. Pues bien, esta ha recaudado en todo el mundo 201 millones de dólares, sin duda una buena cifra considerando que su presupuesto fue de solo 42 millones, aunque para nada espectacular. Se espera que Hill y Tatum repitan al frente del reparto de la secuela.
En cuanto a DreamWorks, ha visto como la odisea prehistórica Los Croods (en la imagen) era bien recibida por la crítica, sin que esto se haya traducido en unas recaudaciones apabullantes, como suele suceder con la animación: Los Croods ha recaudado en todo el mundo 387 millones de dólares a partir de un presupuesto de 135 millones, lo que no es definible como gran éxito de ninguna manera; ha quedado muy por debajo de otras propuestas similares recientes como Ice Age 4 o Cómo entrenar a tu dragón.
Sin embargo, la secuela ocurrirá, y volverán a la misma tanto los actores que prestaron sus voces a los personajes del primer film (entre ellos Emma Stone, Ryan Reynolds y Nicolas Cage) como los directores Kirk De Micco y Chris Sanders.