Tras unos años disfrutando de la fama y los beneficios logrados con la franquicia Matrix, el actor Keanu Reeves (en la imagen) parece haber despertado de un letargo creativo que apenas paliaron Dueños de la calle (2008) y Ultimátum a la Tierra (2008) encadenando proyectos como Man of Tai Chi (que también dirige) y 47 Ronin (que se estrena el 27 de diciembre tras pasar por infinitos problemas de producción).
Reeves continuará en la brecha con Passengers (film fantástico que co-protagonizará Reese Whiterspoon) y con John Wick, intriga de tintes vengativos que ha escrito Derek Kolstad (Una bala en la recámara, The Package) y dirigirán David Leitch y Chad Stahelski, hasta la fecha directores de segunda unidad y de especialistas en After Earth, Lobezno Inmortal, Los Mercenarios y Los Juegos del Hambre.
John Wick, cuya financiación se concretará en el marco de la nueva e inminente edición del Festival de Cannes, cuenta la historia de un asesino a sueldo retirado cuyos instintos criminales saltan de nuevo a la palestra tras un suceso absurdo que le hará enfrentarse a un capo mafioso de Nueva York.