Hablamos hoy de cuatro directores que ya constituyen más que promesas tras sus anteriores films, y que comienzan casi a la vez nuevos proyectos que prometen situarles en la cumbre de la escena internacional.
El primero es Darren Aronofsky, que tras Pi y Réquiem por un Sueño estrena en abril La Fuente, ambiciosa experiencia de corte fantástico interpretada por Hugh Jackman y Rachel Weisz. Su siguiente película será Black Swan, un thriller con el ballet clásico como trasfondo.
Jason Reitman, que ha obtenido muy buenas críticas en Estados Unidos con la comedia negra Gracias por fumar, reincide en el mismo género con Juno, que protagonizarán Michael Cera (Arrested Development) y Ellen Page (X-Men 3).
El alemán Oliver Hirschbiegel, que acaba de terminar el rodaje de The Invasion, con Nicole Kidman y Daniel Craig, se pasa ahora a la recreación de un hecho real, el secuestro y masacre acaecidos en una escuela ubicada en Beslán (Ruisa) hace tres años, a partir de un guión escrito por Braulio Mantovani (Ciudad de Dios).
Y Rian Johnson, una de las sorpresas más agradables de 2006 gracias a Brick, su ópera prima, reunirá en el reparto de The Brothers Bloom a la ya citada Rachel Weisz, Adrien Brody (El Pianista) y Rinko Kikuchi (Babel).