¿Qué ofrece Fundido a negro a los espectadores, qué les destacarías?
Es una película muy entretenida, por el tema que trata, porque te sorprende a cada rato, porque está muy bien rodada, por la calidad de su escenografía, el vestuario,… Los cinéfilos pueden descubrir aspectos de la vida de Orson Welles que no conocían y, además, como es cine dentro del cine, van a encontrar muchos guiños.
Orson Welles llega a Roma para rodar una película, se enamora de una actriz y comienza a investigar un posible asesinato. Son los tiempos de la posguerra mundial, las implicaciones políticas están por todas partes… ¿Qué es lo que más te llamó la atención de este guión?
Un poco todo. No es una película que se pueda catalogar de una sola manera. Es cine negro, pero hay muchos momentos de humor, hay ironía, hay acción, hay misterio. No es una trama fácil. Es muy interesante.
¿Cómo es Lea Padovani, el personaje que interpretas?
Lea Padovani es una actriz que existió en los años cuarenta en Italia, con lo cual es un personaje real, y fue muy interesante hacerlo. Es una mujer con muchas caras, con, digamos, una personalidad múltiple. Por una parte, tiene mucha pasión, quizá no una pasión amorosa, sino más bien por un ideal político por el que lucha, y por otra, es muy reservada y guarda un secreto, y eso la rodea de mucho misterio. Es como una femme fatale, todas guardan un secreto muy escondido. Esta dualidad me pareció muy interesante cuando leí el guión, y un reto.
¿Te documentaste sobre ella para preparar el personaje?
Sí, vi sus películas y descubrí que era una mujer con mucho sex appeal, muy luchadora, una activista política (comunista), todo eso más allá de ser actriz, que era una fantástica actriz. Parece ser que ella y Orson Welles vivieron una historia de amor cuando Orson vino a Europa y estuvo rodando en Italia, ésta es la excusa para crear la trama de la película, aunque la trama criminal de la película es irreal. En Fundido a negro no se pretende una imitación de Lea Padovani, mi trabajo es simplemente una recreación de esta mujer.
¿Qué aspecto del personaje tuviste que trabajar más, el pasional o el hermético?
Una vez que entiendes el personaje, que entiendes el idioma, que ya te has hecho con el texto, luego ya la dificultad surge en escenas puntuales que requieren algo más. Es una interpretación muy sutil.
¿Y con cuál te identificas más?
Pues con los dos. Yo soy una persona muy pasional, muy visceral, tengo mucho genio, pero también por otro lado puedo controlar mis emociones cuando me conviene o cuando es necesario. Entonces, salvando las distancias, tengo mucho en común con este personaje, con esta recreación de Lea Padovani, porque Lea obviamente no sería así.
¿Qué es lo más atractivo de este personaje, de esta recreación de Lea Padovani?
Una mujer que lucha de una manera tan comprometida es atractiva. Cada vez que me llega el personaje de una mujer que por circunstancias se ve obligada a luchar por conseguir un ideal o por perseguir un sueño, siempre es un placer poder hacerlo, además son personajes muy agradecidos. Teresa también luchaba por algo, por una reforma [se refiere a su papel en la también recién estrenada Teresa. El cuerpo de Cristo, de Ray Loriga]. Son mujeres que se encuentran con un handicap y tienen que pasarlo. Estos personajes me gustan mucho.
Como mujer, ¿tú te identificas más con una mujer luchadora?
Así es, sí.
La película ha sido rodada en inglés e italiano, ¿estás cómoda interpretando en otros idiomas?
Me siento bastante cómoda. En este caso, hablo en italiano y, la mayoría del tiempo, en inglés con acento italiano. Tuve poco tiempo para prepararme, pero en el doblaje me concentré mucho en hacerlo verosímil. Da la casualidad de que los dos actores que en la película hablamos en italiano, Diego Luna y yo, no somos italianos, así que tuvimos que trabajar mucho para que, si ven la película en Italia, no se asusten. Es un trabajo extra, pero como actriz descubro muchas cosas sobre mí cuando actúo en otro idioma. Cada lengua, por cómo es su sonido, su entonación, da al carácter un matiz diferente, como instrumento está muy bien para trabajar.
Fundido a negro es una producción británica. ¿Tiene influencia en tu elección de un papel la nacionalidad de la producción? ¿Le estás dando prioridad a trabajar fuera de España?
Cuando me llegan películas, me llegan de muchos sitios, y si el guión me gusta, me lanzo. Pero no le estoy dando prioridad a trabajar fuera, lo que pasa es que realmente me llegan más de fuera que de aquí. Me mandan guiones de Italia, de Estados Unidos, tengo incluso un proyecto latinoamericano.
¿Qué explicación le das tú a que te lleguen más guiones de fuera que de España?
Creo que los directores, o los productores, piensan que a lo mejor yo me he ido o que estoy fuera y que en mi mente no está trabajar aquí, y nada más lejos de la realidad. Aunque viva fuera o esté fuera, si hay un proyecto que me llama la atención en España, ya tengo excusa para volver.
Con tu próxima maternidad, ¿vas a parar de trabajar?
No, tengo ya dos proyectos para el verano, un par de películas en Estados Unidos que se están negociando, con lo cual no puedo decir nada.