Tras horas y horas de reuniones y deliberaciones, los ejecutivos de Universal Pictures y el director James Wan han tomado la decisión de interrumpir el rodaje de Fast & Furious 7, protagonizada como las anteriores entregas de la célebre franquicia automovilística por Vin Diesel y el recién fallecido Paul Walker. Por tanto, la producción de la película queda totalmente suspendida hasta nuevo aviso.
Al parecer, ha sido imposible hallar una fórmula para concluir Fast & Furious 7 en el plazo previsto, con vistas a su estreno en el verano de 2014. Los responsables de Universal y Wan han barajado apresuradamente soluciones como la sustitución por otro actor, la desaparición en la ficción del personaje encarnado por Walker o algún truco infográfico (como sucediese con El Cuervo en 1994 tras la muerte accidental de su protagonista, Brandon Lee), pero han preferido finalmente tomarse las cosas con calma y proceder a conjurar una fórmula que permita a Fast & Furious 7 salir adelante con una garantía de lógica y calidad y con el menor coste posible.
Mientras tanto, sigue especulándose con las razones de la muerte de Walker (en la imagen), copiloto de un automóvil de lujo y gran cilindrada cuya colisión fue brutal, lo que apunta a un exceso de velocidad y/o al consumo de estupefacientes o alcohol por parte del conductor.