4. La central (2006)
Dir: Francisc Giró Int.: Yasmina Córcoles, Eduard Lupo, Manuel Medina.
Para aquellos ingenuos que pensaban que “School Killer”, la muy divertida “Tuno negro” y “La monja” eran lo más cerca que se podía llegar a la tomadura de pelo dentro del cine de horror patrio, Francisc Giró brinda esta cinta hecha entre amigos con aspiraciones de suspense con mayúsculas. Un despropósito entrañable, henchido de una espontaneidad adolescente por momentos encantadora y cargado de la magia especial que hace pasar a la historia las producciones caseras que no brillan por otras virtudes. Al margen de los diálogos impagables (el mejor, el del sándwich), lo más interesante no es el psycho de turno, sino las muchachas perseguidas; no es la matanza sangrienta, sino la fiesta salvaje; no son los hallazgos, sino los tópicos. De ahí que el reparto, juvenil y amateur, brille con una fuerza capaz de emborronar el discurso, en especial las muy prometedoras Paloma Maldonado y Verónica Rossillo.
Valoración en la IMDB: 1.1 sobre 10. 21 votos.
3. Demasiado caliente para ti (1996)
Dir.: Javier Elorrieta Int.: Andoni Ferreño, Ángeles Martín, Dayrein Aba, José Luis López Vázquez.
Marcada por el fracaso y en muchos casos, también por el despropósito, la carrera de Javier Elorrieta reúne tantos títulos demenciales (Los gusanos no llevan bufanda, Sangre y arena, Cautivos de la sombra, Pacto de brujas…) que yo soy incapaz de evitar que el tipo me caiga simpático. En la mayoría de los casos, sus películas no son tan malas como dice la crítica, ni tan insalvables como nos quieren hacer ver; incluso estoy seguro que en cualquier momento puede sorprendernos con una obra verdaderamente estimable. En este caso regaló a sus admiradores una comedia apañadita, con cierta chispa pero entrañablemente desmañada, que despertó la ira de los que ni siquiera se molestaron en verla.
Valoración en la IMDB: 1.0 sobre 10. 6 votos.
2. Franky Banderas (2004)
Dir.: José Luis García Sánchez Int.: Juan Luis Galiardo, María Barranco, Raulito, Teté Delgado.
Inclasificable producto escrito por Rafael Azcona y dirigido por el autor de “La corte del faraón”, al servicio de la efímera estrella infantil Raulito. La estrategia, lograda y no exenta de vitriolo y la justa dosis de amargura, intenta recuperar una fórmula antigua (el cine de niños prodigio, que tantos dividendos dio a nuestro cine), modernizándola a las tiempos que corren y preñándola de una mala baba considerable. Así, las buenas intenciones del mensaje se mezclan con chistes sobre pedofilia y una escena de sexo con Teté Delgado (¡!), dejando estupefacto al espectador bienpensante. Por supuesto, el recibimiento fue terriblemente injusto; exactamente igual que lo que sucedió más tarde con las últimas películas de Antonio del Real o con “El oro de Moscú” de Jesús Bonilla y otros guiones de Joaquín Andujar. Parece ser que hay un sector de la crítica muy poderoso empeñado en enterrar cierta parte de la historia del cine español, precisamente su vertiente más popular, y al que no le basta con ningunear la obra de algunos artesanos de aquella época, sino que también quiere enterrar profesionalmente a sus más insistentes sucesores.
Valoración de la IMDB: 1.0 sobre 10. 17 votos.
… y 1. Kibris, la ley del equilibrio
(2005)
Dir.: Germán Monzó Int.: Pepe Sancho, Paula Vázquez, Javier Aller.
Llegamos a la cima de nuestro ránking con una película que se las trae. Nada menos que 38 espectadores han coincidido en premiar con la puntuación mínima a este híbrido de comedia, horror, cine de artes marciales y puro desmadre, con un reparto de esos que son capaces de tumbarte (¡Lorena Bernal!¡Paula Vázquez!¡Pepe Sancho haciendo de Drácula!), ciertas reminiscencias de la más lograda “Bloody Mallory” y que se justifica por su propia existencia. Pongámonos un poco serios: el hecho de que salgan a la luz este tipo de productos es indicio de una buena salud de la industria cinematográfica, del mismo modo que su defenestración automática no puede significar otra cosa que una preocupante ignorancia de la crítica, así como una aun más preocupante falta de sentido del humor entre el público. Dicho queda.
Valoración en la IMDB: 1.0 sobre 10. 38 votos.