Del Toro me ofreció dirigir el remake norteamericano de 'El Orfanato', pero no quiero pasar demasiado tiempo implicado en el mismo proyecto
En cuanto a soporte y también visualmente, ‘El Orfanato’ es una película clásica, muy pendiente del trabajo de puesta en escena. ¿Cómo valoras los desafíos técnicos y formales que están propiciando el vídeo digital y los estilos de cineastas como Michael Winterbottom y Paul Greengrass en el cine comercial?
Eso dependerá de lo que se quiera contar, porque determinadas características técnicas te pueden ayudar o no a trasladar una historia con más o menos efectividad. Hay muchas películas de terror que funcionan estupendamente en soporte digital, ‘El Proyecto de la Bruja de Blair’ por ejemplo, como en los setenta funcionó ‘La Matanza de Texas’ en 16 mm. También es verdad que el lenguaje cinematográfico madura, lo que no siempre quiere decir que vaya a mejor, y no se pueden olvidar las modas y los ciclos. Puede que la gente termine por cansarse de ese tipo de lenguaje que citabas en las películas y regrese a lo clásico. Ese ha sido sin ir más lejos mi caso, yo no entiendo las películas de otra manera, y para mí las palabras no son las que cuentan una historia sino las imágenes, es al menos la forma en que me he planteado ‘El Orfanato”.
Tu ópera prima se ha colado en el terceto de películas que la Academia Española de Cine propondrá a sus votantes para que la ganadora compita por el Oscar a la mejor película de habla no inglesa, y además cuenta con una campaña de promoción intensa. ¿Sientes la responsabilidad de lograr un éxito que compense al cine español de una temporada decepcionante?
Ya me gustaría, ya me gustaría a mí lograrlo, sobre todo en lo que respecta a la recepción del público. En cuanto a la Academia, que nos haya incluido en ese terceto nos hace mucha ilusión, porque de alguna manera constata una apuesta de futuro. Que estemos nosotros, gente que en su mayor parte empieza con ‘El Orfanato’, junto a directores consagrados como Fernando Colomo [por ‘Las Trece Rosas’] y José Luis Garci [por ‘Luz de Domingo’] me parece una sorpresa por la que estoy muy agradecido y que, repito, supone ante todo una apuesta de futuro.
Se ha hecho pública la realización de un ‘remake’ norteamericano de ‘El Orfanato’. Queríamos saber tu opinión sobre este caso en concreto pero también, en general, sobre los ‘remakes y las secuelas, una estrategia de producción que el Oscar conseguido por ‘Infiltrados’ parece haber legitimado por fin.
Para mí el cine es una cuestión, básicamente, de buenos guiones y de buenos directores. Normalmente, cuando se hace un ‘remake’ se escoge obviamente una historia que ya ha funcionado antes, y no creo que constituya un problema grave revisarla. Hay películas flojas con ideas brillantes, muy originales, que a lo mejor incluso mejoran si son llevadas nuevamente a la pantalla por un director valioso. En el caso de Scorsese con ‘Infiltrados’, curiosamente, resulta que ‘Infernal Affairs’, la película en la que se basaba su ‘remake’, estaba además muy influenciada por su estilo, por lo que se ha producido un intercambio enriquecedor. Yendo al caso concreto de ‘El Orfanato’, Guillermo del Toro fue muy generoso y me ofreció dirigir la nueva versión, pero he declinado su amable oferta más que nada porque me parecía pasar demasiado tiempo metido en el mismo proyecto.
¿Te ves siguiendo pronto el camino de Juan Carlos Fresnadillo [‘28 Semanas Después’] y dirigiendo a nivel internacional?
Pues dependerá de la historia, ya he recibido dos ofertas en ese sentido. Pero en cualquier caso debo valorarlas con calma. Quizás no es el momento, con la mente todavía puesta en ‘El Orfanato’, de decidir nada con precipitación.