La exhibición y venta de películas por internet también ha puesto en pie de guerra al sindicato de actores, que pretende renegociar su convenio con la industria para poder aspirar a un pellizco de los beneficios que las nuevas formas de distribución están granjeando a las productoras.
La fuerza del sindicato es tal (cuenta con ciento veinte mil miembros) que las fechas de numerosos rodajes se están acelerando o desechando con tal de que el próximo 30 de junio no haya nada en marcha que pudiera verse afectado por los paros. Esta situación no es tan grave para las películas como para las series debido a su inmediatez, y de hecho 24 ya ha sido cancelada hasta 2009.
En cualquier caso, largos tan relevantes como The Lovely Bones, de Peter Jackson, o Shutter Island, dirigida por Martin Scorsese, se ruedan a toda velocidad en estos momentos para no toparse con la fecha fatídica del 1 de julio. Otros, como Nottingham (de Ridley Scott), han sido aplazados sine die.