Aunque se daba por hecho que tras su gran implicación personal en Batman Begins y, especialmente, El Caballero Oscuro, Christopher Nolan dirigiría asimismo la tercera entrega del Batman cinematográfico que ha recreado junto a su hermano Jonathan Nolan, ciertas páginas web norteamericanas empiezan a apuntar que quizás las cosas se desarrollen de una manera diferente.
Nolan, enfrascado actualmente en la preproducción de Inception, podría sentirse agobiado por la responsabilidad de reeditar el descomunal éxito de El Caballero Oscuro. De hecho, ya se encontró en la misma tesitura anímica tras Batman Begins, aunque Jonathan y David Goyer (tercer guionista de esta saga junto a los Nolan) lograsen convencerle finalmente para que repitiese tras la cámara en El Caballero Oscuro.
Ahora la situación es aun más delicada, y no ayuda la muerte de Heath Ledger (intérprete del Joker en El Caballero Oscuro), suceso que al parecer ha afectado enormemente a Nolan. No ya a nivel emocional, sino incluso estratégico: el Joker era presencia segura en la siguiente película, y el que no sea así —pues Nolan ha manifestado a la productora Warner Bros. que no está dispuesto a admitir a otro actor en ese papel— obliga a replantear por completo la estructura dramática.
Todas estas circunstancias están forzando a Warner Bros. a retrasar la película, cuyo estreno pasaría a tener lugar, de cumplirse los peores presagios, en 2012 o incluso 2013. Lo cierto es que nada más se sabe a fecha de hoy, salvo que Christian Bale tiene un compromiso (contrato mediante) para encarnar a Batman por tercera vez, y que Jonathan Nolan y David Goyer están ganando tiempo a base de aportar ideas argumentales a los ejecutivos de la Warner, nada felices con la idea de que Christopher abandone el barco.