El mercado chino más que una vía de negocio aparece siempre como un quebradero de cabeza para los desarrolladores de contenidos. La desbordada cultura de la piratería hace inviable obtener ingresos por las producciones, y hasta la fecha no se ha logrado combatir un peligro para la industria que se encuentra muy arraigado en el país (y del que en nuestro país hay poco que decir, pues para sorpresa de los países desarrollados, somos los siguientes en la lista de visionarios que creen que las películas crecen de los árboles).
A pesar de ello, la Fox, en alizanza con Star Group, va a producir el primer film realizado y pensado para la audiencia China, bajo el nombre Hot Summer Days (cálidos días de verano). Representantes de la compañía china no quisieron pronunciarse sobre los costes ni la proporción que sufragará cada una de las partes, pero sí ha podido saberse que se trata de una comedia romántica y que en la Fox se encuentran encantados con el proyecto: "es uno de los mercados más apasionantes que hay hoy día", en palabras de su presidente.
El objetivo de la corporacion estadounidense es, dejando a un lado las cuestiones de venta ilegal de sus productos, apuntar a un box office que el año pasado sí presentó unas cifras crecientes frente a la caída general de las taquillas occidentales. Se calcula que en el último ejercicio crecieron hasta 600 millones de dólares, y tras la declaración en agosto de la Organización Mundial del Comercio de que el monopolio de China en la distribución de películas extranjeras viola los tratados de libre comercio, la situación parece propicia para invertir. Como apunte curioso, la película extranjera que más recaudó en el año anterior fue Kung-Fu Panda con 181 millones de yuans.