Dos estrenos se alzan directamente con las primeras posiciones en Estados Unidos. El primero de ellos se trata de Takers, un thriller criminal con un plantel se actores más que solventes aunque todos ellos secundarios. El último exorcismo es el otro filme que conseguido captar la atención del público mediante un casting desconocido, el favor de la crítica y una historia terrorífica. Stallone y su equipo y Roberts siguen midiéndose las fuerzas y los géneros en tercera y cuarta posición.