Mínimas variaciones en la taquilla norteamericana esta semana. El thriller independiente Conviction, con Hillary Swank, logra escalar puestos y figurar en el top ten gracias al boca-oreja, mientras que el resto de filmes se mantienen en sus puestos, únicamente molestados por el impacto del final de Saw, que vuelve en 3D, como no podía ser menos, y augura así el final de la serie.