A los ochenta y ocho años de edad ha fallecido en Santa Mónica, California, el guionista, productor y director estadounidense Blake Edwards. En el momento de su muerte le acompañaban su mujer desde 1969, la actriz Julie Andrews, y sus hijos.
Aunque su desaparición se ha debido a una neumonía, el realizador padecía desde hacía años el síndrome de fatiga crónica, lo que dificultó considerablemente su actividad profesional: su última realización data de 1995 y era, en cierto modo, un remake de uno de sus mayores éxitos, ¿Víctor o Victoria? (1982). Por ello, es posible que las nuevas generaciones de cinéfilos no le tengan muy presente. Sin embargo, durante las décadas de los sesenta y los setenta su nombre fue sinónimo de éxito en las carteleras, gracias a su don para la comedia elegante, combinado hábilmente con otros registros como el slapstick, lo dramático o la intriga. Talento que le procuró un Oscar honorífico en 2004.
Edwards es el responsable de la saga La pantera rosa, nacida en 1963 con Peter Sellers en el papel del Inspector Clouseau, torpísimo detective que debía evitar el robo de la joya que daba título al film. La pantera rosa dio lugar no solo a diez continuaciones o remakes (protagonizados por Sellers, pero también por Alan Arkin, Roger Moore, Roberto Benigni y Steve Martin), también a varias series de dibujos animados y hasta a un producto de bollería industrial aún a la venta.
Además, Edwards firmó en 1961 Desayuno con diamantes (en la imagen), adaptación de la novela homónima de Truman Capote que protagonizó Audrey Hepburn e inmortalizó musicalmente (como ya sucedió en La Pantera Rosa) Henry Mancini. Otros grandes éxitos en su filmografía son Operación Pacífico (1959; con Cary Grant, Tony Curtis y un submarino… rosa), Días de vino y rosas (1962; estremecedor drama sobre el alcoholismo con Jack Lemmon y Lee Remick), La carrera del siglo (1965; de nuevo con Jack Lemmon y Tony Curtis), la celebérrima El guateque (1968), 10, la mujer perfecta (que convirtió en 1979 a Bo Derek en icono sexual) y Asesinato en Beverly Hills (1988, con James Garner y Bruce Willis).
Nacido en 1922 en Oklahoma, Edwards era hijo de un director de escena y se inició profesionalmente en el mundo del espectáculo como actor, y como guionista para el cineasta Richard Quine y series como Peter Gunn (donde conocería a Mancini), antes de echar a volar en solitario como maestro de la comedia.