Esta semana tan sólo tocar comentar un único estreno, aunque su valor vale por cinco, o más... Le pese a quien le pese, la cuarta entrega de la ya mítica saga de Torrente se ha convertido en el estreno español más visto de la historia en nuestro país. Y lo ha hecho superando los 8 millones con un estreno en 665 salas comerciales. Queda claro, pues, que el cine español ha remontado la triste debacle que llevó en 2010. Sólo gracias a este estreno, este primer trimestre en el que nos encontramos muestra unas cifras que superan en un 80% a las registradas el mismo periodo del año pasado. Torrente es, simplemente, un fenómeno social patrio.