Como os anticipábamos el pasado 18 de abril, Arnold Schwarzenegger volverá a participar en la franquicia Terminator, tras su ausencia de la misma en la cuarta entrega, Terminator Salvation, debido a sus compromisos como gobernador de California.
Las conversaciones que Schwarzenegger ha mantenido con el director previsto de Terminator 5, Justin Lin, han concluido con un acuerdo y un argumento para el film cuyos detalles no se han hecho públicos, aunque sí su valor: Veinticinco millones de dólares habrá de pagar el estudio que pretenda hacerse con Schwarzenegger, Lin y la historia que tienen en mente.
Un precio aceptable, a tenor de la puja por el proyecto desatada entre Sony, Lionsgate y Universal. La última productora y distribuidora citada parte con ventaja, al haber negociado ya con la actual poseedora de los derechos de la franquicia, Pacificor, una estrategia para desarrollar más Terminator en la gran pantalla. Además, Justin Lin es un director de confianza para Universal, como demuestran las tres últimas entregas de la saga The Fast and the Furious, realizadas por Lin para el estudio con bastante éxito comercial.
Nadie en Estados Unidos ha sabido como tomarse el regreso de Schwarzenegger a Terminator, si como una buena o una mala noticia. Lo único cierto es que, de nuevo, James Cameron se mantendrá al margen del proyecto, ya que hasta 2018 no volverá a recuperar los derechos sobre el personaje y su universo, cedidos a otros durante veinticinco años. Hasta entonces, lo más probable es que no veamos otra cosa que subproductos (Terminator Salvation casi lo era), pero crucemos los dedos.