El pasado mes de octubre, los asistentes a la última edición del Festival de Sitges tuvieron la oportunidad de ver The People vs George Lucas, documental de Alexandre Philippe que analizaba la inaudita repercusión popular de la saga Star Wars y el odio que su creador, George Lucas (productor también de la tetralogía sobre Indiana Jones), se ha ganado con el tiempo entre los cinéfilos por su descarado comercialismo y por la escasa calidad que manifestaron La Amenaza Fantasma, El Ataque de los Clones y La Venganza de los Sith (episodios I, II y III de Star Wars, estrenados entre 1999 y 2005) así como Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal.
Pues bien, el tema de la progresiva decadencia artística de George Lucas y su conversión en mero facturador de merchandising (que para algunos tiene evidentes paralelismos con la caída de Annakin Skywalker en el lado oscuro de La Fuerza), será objeto de una nueva película: George Lucas Strikes Back [George Lucas Contraataca], falso documental que especula atrevidamente con la idea de que el productor y director californiano fue secuestrado tras el estreno de Indiana Jones y la Última Cruzada (1989) y asiste impotente desde entonces a su suplantación por un doble que, siguiendo un plan maquiavélico, se ha dedicado a destrozar el legado emocional entre los aficionados de las tres primeras Star Wars y las otras tantas aventuras de Indiana Jones.
Dirigida por Bridge Stuart y Mike Litzenberg, George Lucas Strikes Back contará con los testimonios de personalidades cinematográficas aún por descubrir que darán su opinión sincera sobre el trabajo de Lucas en los últimos años, lo cual como puede imaginarse no ha sentado nada bien al afectado.