Tras desentenderse del proyecto Steven Spielberg y Will Smith, el director afroamericano Spike Lee podría ser el encargado de filmar la versión USA del mítico thriller surcoreano (en la imagen). Benicio del Toro o Viggo Mortensen se cuentan entre los actores barajados para encarnar al torturado protagonista, encerrado sin saber por qué por un desconocido durante quince años.