Aunque los espectadores de hoy no la tendrán demasiado presente, basta con pensar en el díptico Kung Fu Panda para comprender la resonancia de la serie Kung Fu, emitida entre 1972 y 1975 por el canal ABC que propició, junto a las películas del mítico Bruce Lee, la introducción de las artes marciales orientales en Occidente.
Protagonizada por el hoy fallecido David Carradine (en la imagen), Kung Fu no era solo una serie de acción, también contenía modestas píldoras filosóficas para calmar el espíritu en unos tiempos tan convulsos o más que los nuestros.
Aunque Kung Fu generó en los años posteriores a su emisión tres largometrajes televisivos, nunca había sido llevado al cine. Ahora, el estudio Legendary Entertainment ha decidido hacerlo con una película que se rodará en China el próximo verano y que ejercerá como precuela (escrita por John McLaughlin) de la producción original.
El realizador podría ser, si sus negociaciones con Legendary Pictures llegan a buen puerto, Bill Paxton, conocido por su faceta como actor en la serie Big Love y varios films de James Cameron, y director de Escalofrío (2001) y Juego de Honor (2005).