Zak Starkey parece haber heredado de su padre, el exbeatle Ringo Starr, el gusto por las baquetas. Sin embargo, durante su infancia, Zak habría recibido los consejos de su progenitor para que no siguiera sus pasos en el mundo de la música. Pero Starkey cultivó su temprana pasión por la batería, un instrumento en el que se inició a los 10 años, y ahora, con 38 primaveras, se convierte en el nuevo batería de los británicos Oasis. Así, la banda de los hermanos Gallagher suple la vacante de Alan White, quien abandonó la formación por petición expresa de los otros miembros del grupo.
Durante su trayectoria, Zak Starkey ha sido miembro de diversos conjuntos musicales. En su adolescencia, cuando abandonó el colegio para dedicarse por completo a la música, participó en The Next, una formación de música garage. Poco después sus padres lo echaban de casa. También participó en una reunión de la Spencer Davis Group y trabajó con Eddie Hardin. Después del nacimiento de su hija, Starkey se convirtió en un músico de estudio, y grabó con The Icicle Works, The Waterboys y The Lighting Seeds. Hace pocos meses pudo cumplir su sueño de niñez, tocar la batería con The Who.
Durante los últimos meses, Oasis ha estado trabajando en el que será su nuevo trabajo discográfico. Éste será el sexto álbum de estudio de su carrera y sucederá a “Heathen Chemistry”, editado en 2002. Según anunció el grupo en noviembre del año pasado, la producción de los nuevos temas iba a ser realizada por la banda Death in Vegas, formada por Tim Holmes y Richard Freeless. Sin embargo, algunas informaciones apuntan a la posibilidad de que los hermanos Gallagher hayan desechado esta posibilidad, descontentos por el trabajo realizado. Por tanto, sería el mismo Noel Gallagher quien se encargaría de la producción del disco en su propio estudio.