Ansiado es una banda procedente de Barcelona cuya actividad se inició en el año 2000 y que ha tenido diversos vaivenes dentro de su formación hasta llegar a la actualidad, consolidada con Juan Carlos Martin “Pinpon” (voz), Jesús Sanz “Chiky” (guitarra), Xavi Ortiz (guitarra), Cristian Maggiolo (bajo) y Rubén “Barrikelo” Fernández (batería).
En 2005 publicaron su debut discográfico, Aprendiendo A Vivir, bajo su anterior nombre, Ansia, el que debieron cambiar por cuestiones legales.
Viajando A La Eternidad, es su segunda entrega, un trabajo que pone en contacto, con personalidad y vibrante creatividad, dos universos paralelos que no suelen entrar en colisión, el heavy metal y el rock urbano “made in Spain”. Sin embargo, se podría decir que han encontrado el eslabón perdido entre uno y otro género, fusionando esquemas de ambos para entregar un álbum robusto y de gran consistencia, donde no faltan las melodías y los riffs desequilibrantes.
Por una parte, tenemos las voces características que suelen dar identidad al rock estatal, además de unos ritmos cuyo temperamento también está asociado al sonido registrado por numerosas bandas nacionales. Pero, por otro lado, está la tremenda y laboriosa contribución de las guitarras, que incursionan con impresionante eficiencia y variedad de recursos en los parámetros del heavy, absorbiendo, en algunos casos, influencias propias de Iron Maiden o de Judas Priest, sin olvidar la presencia de filigranas guitarreras que muestran intrincados desarrollos al estilo de algunos “guitar heroes” actuales. Además, es resaltable la aparición del bajo en determinados momentos, instrumento que en ocasiones no suele tener el protagonismo que merece.
En cuanto a las letras, tienen su punto emotivo, con argumentos sólidos. El único defecto es que, en alguna que otra ocasión, ponen en aprietos a “Pinpon”, a la hora de armonizar los tonos.
Sin duda, una apuesta arriesgada pero valiente, que elimina ciertas fronteras y nos muestra combinaciones sonoras que, descritas con palabras, pueden despertar el asombro pero resultan de lo más agradables una vez se ponen a prueba del oído.