Josephine Ayling, Alisha Buttke y Aurora Aroca son Boat Beam. Este trío de mujeres de orígenes diversos ha construido un mundo propio cuya banda sonora se nutre de voces, guitarras acústicas, teclados e instrumentos clásicos de cuerda. Su primera obra se titula 'Puzzle Shapes', hablamos con Aurora, la chelista española del grupo.
Ahora que ya está en la calle, ¿cuál es el punto fuerte de vuestro primer disco? ¿Hay alguna cosa que pensáis que podrías haber hecho mejor?
Creemos que el punto fuerte son los temas en sí, y el hecho de que no se adscriban a un estilo muy cerrado. Nos atrae la idea de mostrar diferentes “rostros”, porque no nos gustaría resultar monótonas. Y sobre lo que podríamos haber mejorado, pues siempre queda alguna espinita que a veces no se descubre hasta meses después, cuando a base de dar vueltas y revueltas a los temas durante los ensayos para los conciertos, encontramos unos arreglos que nos gustan más que los que pensamos en su día; pero esta es precisamente la gracia de la música, que está viva, y que como tal, siempre resulta imprescindible escucharla también en directo.
¿Tenéis alguna pauta de trabajo para la composición de las canciones u os dejáis llevar un poco por la improvisación y la inspiración del momento?
Es más bien lo segundo, aunque siempre estas improvisaciones parten de una manera de hacer que obedece, consciente o inconscientemente, a unas pautas personales. De todas formas, no todas las canciones nacen de la misma manera: algunas sólo son música al principio y se visten con las letras más tarde (que han podido ser escritas mucho antes, o después de haberlas concebido), y otras son mellizas, música y letra.
¿Cómo trasladáis las canciones de Puzzle Shapes al directo?
Como nos lo permiten nuestro número de brazos y piernas... Básicamente intentamos, dentro de las limitaciones de nuestra formación instrumental, recrear lo más fielmente posible la esencia de cada una de las canciones. Eso nos exige, obviamente, modificar arreglos; y también jugar mucho con las dinámicas, con los timbres…, etc., para mantener el interés a lo largo del desarrollo de los temas.
¿Tenéis en mente incorporar a músicos adicionales en vuestras actuaciones?
Sí, nos atrae la idea de colaborar con otros músicos; de hecho, ya comenzamos con los chicos de Esfumato en la presentación de nuestro disco en Casa de América de Madrid. Y para los conciertos en escenarios grandes, como festivales, donde el sonido que se requiere es mucho más potente que el que podemos llegar a desarrollar con nuestro formato acústico actual, tenemos planeado incorporar una sección rítmica que nos tiene entusiasmadas.
Ya habéis presentado el disco en La Casa de América de Madrid y también participasteis en el Primavera Sound de Barcelona. ¿Cómo os habéis sentido en estas dos citas? Y, ¿cuál ha sido la reacción del público?
Bueno, estamos hablando de dos escenarios y circunstancias muy diferentes. Nuestra pequeña actuación en la carpa del Salón de MySpace del Primavera Sound, alrededor de las cinco de la tarde, dista mucho de la presentación de nuestro disco en la Casa de América. Si bien actuar en el marco de un festival de tanta calidad y relevancia fue toda una sorpresa para nosotras y nos produjo un subidón impresionante el mismo día en que supimos que íbamos a tocar, la presentación de nuestro disco fue algo que también esperábamos con muchas ganas, y para la que estuvimos invirtiendo muchas energías y tiempo. En el Primavera Sound éramos unas invitadas más, con la relativa tranquilidad que esto conlleva, porque sabes que la mayoría de la gente que a esas horas iba a aparecer –que en principio pensábamos que no sería mucha- vendría de paso; sin embargo, en Casa de América éramos las anfitrionas, así es que no podíamos dejar ni un solo resquicio a la posibilidad de defraudar a quienes iban a venir a escucharnos. En ambos casos la respuesta del público resultó positiva, ¡o esa impresión nos quedó al menos!
Penúltima pregunta... y también casi obligada... ¿qué planes tiene Boat Beam para los próximos meses? ¿Tenéis alguna idea para el próximo disco?
Ya hay unos cuantos temas nuevos en el bote que estamos desarrollando con tiempo, porque el proceso de elaboración es lento cuando se quieren pulir los detalles al milímetro. Nuestra intención es seguir trabajando en ellos e ir componiendo otros nuevos para que, una vez llegado el momento de ponerse a grabar, tengamos material de sobra como para poder descartar lo que no nos convenza del todo y elegir aquellas canciones que verdaderamente consideremos que tienen “chispa”. En general, nos gustaría seguir la misma tónica de eclecticismo que perseguíamos con el anterior disco, para lograr evocar un paisaje variado en cuanto a orografía y estímulos sensoriales.
Hace muy poco que se ha celebrado el Día de la Música (21 de junio). ¿Algún deseo o reivindicación que manifestar en una fecha tan concreta?
El deseo-reivindicación que tal vez queremos expresar con más fuerza es que este tipo de arte obtenga la consideración, a nivel social, que se merece. Requiere mucho esfuerzo y dedicación el profundizar en la música, y si además te dedicas profesionalmente a ella, es necesario mantener una disciplina de gimnasta para no perder la tonicidad que exige la ejecución de cualquier instrumento. Es por ello que resulta muy molesto el comprobar que, para un gran número de personas, el ser músico no entra en su concepción de poseer un oficio.