Tres años después de su primer trabajo Under Reprisal, los canadienses vuelven a la carga con un disco que a lo largo de sus trece temas ofrece una versión ampliada y en gran parte mejorada de su anterior obra.
Usando una forma que cada vez es más común entre los grupos noveles, la banda se dio a conocer a través de internet a raíz de colgar su maqueta en una web de descargas, donde fueron número uno durante varias semanas y recibieron todo tipo de premios hasta que fueron fichados por Nuclear Blast.
Antes tuvieron que enfrentarase a la salida de casi todos los miembros de la formación, excepto el vocalista Jon Howard (Arkaea, junto a miembros de Fear Factory) y el bajista Pat Kavanagh, quienes grabaron su primer trabajo consiguiendo el aplauso de crítica y público que llegó a considerarlo uno de los discos del año.
Vigilance vuelve a repetir prácticamente la misma fórmula que tan buen resultados les dio. Aquí lo que abundan son los temas aplastantes, con estribillos muy melódicos y adictivos y voces que oscilan entre las limpias a las guturales, siendo la labor de Jon Howard uno de los rasgos más destacados de toda la obra, si bien nos encontramos ante una entrega con una mayor importancia en lo instrumental. Así que en su línea podemos escuchar trallazos groove y death melódico con tintes metalcore. Hay cortes accesibles como Lost -muy comerciales y adictivos-, y otros para partirse el cuello en un concierto como Severed o Revision, dándole al conjunto una acertada combinación entre caña y melodía que lo hace muy entretenido de escuchar.
Tampoco faltan otras señas de identidad, como el uso de samplers en Through My Eyes que suena tras un demoledor inicio de disco con Afterlife o los numerosos cortes de tipo death metal melódico. Se hacen presente sonidos a lo Lamb Of God en cortes como United We Stand, con piezas más trabajadas y técnicas que hace que sea una obra casi redonda para los que les encanto su debut.
En conjunto, un disco de calidad, sólido y variado, muy parecido como decimos a su trabajo anterior si bien sin esa chispa que les puso en boca de todos, quizá por la falta de originalidad en general y la falta de pegada en algunos temas. Aun así, es la confirmación de una agrupación que queda como referente de un nuevo sonido. Ya sólo queda ver en directo a esta máquina de hacer metal.