Cardio es una oda al libertinaje de la que según su autor ha sido la mejor época en su vida, los años 60, y sus mejores años en su vida profesional como músico, los 80. En el disco que nos ocupa, Miguel Bosé no se olvida, tampoco, de su periplo por tierras americanas, el polémico concierto en La Habana (Cuba) con Juanes y sus últimas tendencias musicales, la música electrónica de DJ´s.
También se retrata así mismo, fiel reflejo de la portada de su nuevo disco como si de una revista de moda se tratase. Su orientación sexual también tiene mucho que ver en la fuente de inspiración para marcar nuevos experimentos en el sonido, ya que es la primera vez que no se autoproduce. “Me siento muy Drag Queen, aunque con este cuerpazo que se me ha quedado tras perder más de veinte kilos, podría desfilar”, confirmaba el artista ante los medios que asistieron a la presentación de su nueva obra.
Se trata de un trabajo fresco, innovador, rockero con ápices electrónicos, y pop de últimas tendencias. Tien algo de trabajo insólito, experimental y le ha motivado a trabajar con gente muy dispar que ha sabido aportar su toque personal. Caso del guitarrista, al que llama brit, por aquello de sus toques británicos y escalas indies. El fondo de la música recuerda mucho a Papito, de la escuela latina.
Algo pasa con Bosé. Todo lo que toca, suene distinto o igual, a la gente le termina gustando. Tiene presencia, tono, elegancia y atractivo definido. Se le paró el reloj hace tiempo. De Don Diablo a la versión de Morena Mía de Papito hay un cambio radical, pero gusta a todas las generaciones. Es capaz de convencer con su magnífico léxico persuasivo (echó elegantemente, como un auténtico dandy, a un reportero de prensa rosa que se bajó los pantalones) como de hacer lo propio con su música. Seguramente, si comandara un ejército americano por Afganistán, los españoles terminarían creyendo que las guerras son positivas.
Estuve a punto de… ya suena fuerte en todas las radios. No es para menos, es el single de Bosé y eso es sinónimo de liderato en ventas en poco tiempo, tanto en España como en Latinoamérica. Para él, vender más de dos millones de copias de Papito no es un incordio, si no un reto y una fuente de inspiración para seguir componiendo más canciones. En Júrame se atreve con el rap y coros poperos de delirios de extrañeza total.
Tiempo para lo que mejor sabe hacer y más le ha gustado siempre, cantar poesía a modo de balada, como sefine Por ti o La Verdad. Dame Argumentos y Cardio son los clásicos temas que animan a despertarse en un día de extrema pereza. Sonidos ochenteros, coros avivados y ritmos muy dérmicos. Ayurvédico y Dame Argumentos son las canciones más indies y rockeras del disco, las más novedosas del nuevo Bosé. Pero no es hasta la última track, Eso No, cuando uno se da cuenta del cambio (influencias musicales de Kings of Leon) y de la sensualidad y provocación de la canción y el disco en general, pues él lo define como una liberación “artística y personal”.