Los grandes grupos han de crecerse en grandes escenarios, y eso hizo Queen en 1985, en el Live Aid apadrinado por Bob Geldof. El cruce de Bohemian Rhapsody, Radio Ga Ga y We Will Rock You dio para el que ha sido votado como el mejor concierto de la historia, y disparó la ya de por sí alta popularidad de la banda capitaneada por Freddie Mercury.