Todos conocimos a Youssou N' Dour cuandó cantó a dúo con Neneh Cherry la mítica Seven seconds, allá por los noventa. El artista ahora acaba de ganar el que se considera el Nobel de la Música, el premio Polar de Suecia por contribuir, a través de su música, al acercamiento de las culturas y las etnias. Dicho pemio también lo han merecido en el pasado artistas como Paul McCartney, Bob Dylan o el violinista Yo-Yo Ma.
Según palabras del jurado, el artista senegalés continúa la tradición griot del oeste de África, pero mostrando que también puede evolucionar "en una narrativa sobre todo el mundo". Su trabajo ha ayudado además "a reducir la animosidad entre su propia religión, el Islam, y otras religiones y su voz abarca la historia y el futuro de todo un continente, sangre y amor, sueños y poder".
El premio fue ex aequo para la compositora finlandesa Kaija Saariaho, que ha escrito música de cámara, obras para orquesta y operas y es conocida por combinar instrumentos acústicos con sonidos electrónicos."Saariaho es una maestra moderna que abre nuestros oídos y hace enamorar con sus yunques y estribos", dijo el comité.