Si en la actualidad el currículum de galardones y reconocimientos de una banda sirviera para multiplicar sus ventas, a buen seguro que Volador ocuparía un puesto importante en la lista de las formaciones más vendidas de nuestro país. El trío, que lleva en marcha desde 2003, cuenta en sus vitrinas con un repertorio de premios musicales que ya desde sus inicios atestiguaban que estábamos ante una formación prometedora.
Los aragoneses sacan adelante su tercer álbum tras Trozos de amor y otras miserias y El fantástico mundo en su interior, además de haber participado en un película documental de Jorge Nebra (Hijos del Cierzo). El largo viaje, publicado en un primer momento en 2010 –y merecedor del premio a mejor grupo en los Premios de la Música Aragonesa– se ha relanzado con una edición que incluye el concierto que dieron en el festival Luna Lunera, un documental sobre la banda, el videoclip de Lejos de la tristeza –nominado al premio pertinente en los mencionados galardones– y un making of relativo a la elaboración del disco.
En lo musical, el álbum no esconde sus cartas y ofrece desde su arranque una colección de canciones pop sin complejos que, englobadas ligeramente en ese concepto de viaje que sobrevuela estos cincuenta minutos, buscan calar en el oyente y provocar que acabemos por tararearlas en apenas un par de escuchas. Se trata, pues, de una tarea para la que se requiere talento, y donde ya han triunfado en décadas anteriores un buen número de bandas estatales que cantaban en castellano.
Destacan por su optimismo y luminosidad cortes como Lejos de la tristeza, El día de la suerte mundial (con reminiscencias a Andrés Calamaro), Una maleta o el corte que da título al álbum, así como las dos colaboraciones destacadas que aportan un toque especial: por un lado Shuarma (Elefantes) en El último abrazo, por otro Clara Téllez (Los Peces) en De estrellas y rosas. En definitiva, El largo viaje supone un atractivo paseo por una colección de pop bien ejecutado, variado y efectivo, aunque tal vez en el mercado actual ni siquiera baste con eso para lograr triunfar en este cruel negocio de la música, pese a que haya muchos grupos de características similares que ya se hayan ganado un puesto entre los más estimados por el público.