Para los más jóvenes y no iniciados en la discoadicción, ¿quién era Tony Manero? ¿Qué representa para la banda?
Lalo López (LL): Tony Manero es el protagonista de “Fiebre del sábado noche”, una película que fue un icono de la cultura disco de los 70. Nosotros, después de una ingestión desmesurada de visionados de la película, tomamos su nombre para crear la Fundación como una ONG que ayudase a toda la gente que quería recuperar o vivir ese tipo de música disco, música bien hecha, pero, al mismo tiempo, con el espíritu de hacer bailar.
Con esos principios ideológicos, ¿cómo coincidís los miembros de la banda y empezáis a tocar juntos?
Miguelito Superstar (MS): Fue poco a poco. No empezamos diez, sino que éramos menos al principio. Fuimos pillando a gente según íbamos creciendo y porque había más trabajo. El cambio definitivo fue coger el autobús: pudimos dejar de ser nueve, que éramos los que cabíamos en una furgoneta, y se unió el trombonista. De momento, somos diez y no tenemos intención de superar esta cifra.
Esa unión queda reflejada en vuestro primer disco “Bikini (Barcelona), 17-18 marzo ‘99”, donde hacéis un homenaje a grandes nombres de la música disco-funk-soul, ¿puede considerarse este disco como vuestra declaración de principios?
LL: Totalmente. También lo hicimos con la idea de que fuese el recuerdo de esas actuaciones que fueron muy importantes para nosotros. Al final generamos una especie de dinámica en la gente de que cada jueves podía estar en la Bikini y compartir con nosotros una hora y media de demencia discotequera. Ese disco representa perfectamente lo que fue la primera etapa de la Fundación, en la que hacíamos versiones porque estábamos en nuestra fase de aprendizaje del género. Allí se gestó nuestra manera de ver los shows: diez personas sudando, bailando y ofreciendo ritmo sin parar.
MS: Es el recuerdo de esos bolos, que habían sido muy especiales. Estuvimos seis meses tocando cada semana y queríamos dejar algo para recordarlo.
En 2001, editáis “Looking For La Fiesta”, ¿cómo os tomasteis el paso de las versiones a componer temas propios?
MS: Como la cosa iba bien empezamos a pensar en hacer un disco de estudio. No nos parecía interesante ni lógico grabar en estudio las versiones que hacíamos en directo, que eran muy parecidas a los temas originales. No había más remedio que ponerse a componer.
LL: Nosotros, cuando nos reunimos, tenemos la vocación de divertirnos. En ese momento, estábamos haciendo lo que nos gustaba, nos ocupaba cada vez más tiempo y nos salían conciertos. Era el momento de volcar todo eso. Además, habíamos estado en otras bandas, haciendo canciones y, por tanto, había todo un pósito. Entonces sale “Looking For La Fiesta” que, en el fondo, es como un disco de alumnos de la música disco. Ahí puedes percibir claramente las influencias de los grandes, como Earth, Wind & Fire, Barry White o The Jacksons.
Foto: Vicente Morales