La maquinaria de producción que implica el lanzamiento de un nuevo disco de Madonna ya está en marcha. Su próximo trabajo, titulado “Confessions On a Dance Floor”, estará en las tiendas de todo el mundo el próximo 15 de noviembre. Según la cantante, el álbum está hecho para que "la gente salte de sus asientos", lo pase bien y no pare. Para los más impacientes, algunas emisoras de radio ya han estrenado el primer single, “Hung Up”, basado en un sampler del clásico “Gimme Gimme Gimme“ de los suecos ABBA.
Este disco supone la vuelta de la diva a los circuitos de la industria discográfica tras dos años de ausencia y la edición de “American Life“. El nuevo disco fue grabado a principios de 2005 en Londres y tiene como objetivo principal que suene en las pistas de baile de todo el mundo. Para conseguirlo, Madonna ha trabajado con Stuart Price, miembro de Zoot Woman, también conocido como Jacques Lu Cont, alma del proyecto Les Rythmes Digitales. Price ya había colaborado con la cantante como director musical de las giras “Drowned World Tour” y “The Reinvention Tour“.
En la grabación de “Confessions On a Dance Floor” también han participado Mirwais Ahmadzai, productor de los discos “Music” y “American Life”, Bloodshy & Avant, así como Anders Bagge y Peer Astrom de The Murlyn Music Group, así como Joe Henry.
Aparte del mencionado “Hung Up”, el álbum contendrá otros temas dance como “Get Together“, “Sorry“, “Future Lovers” o “I Love New York”. En el CD se han eliminado los espacios entre canciones, consiguiendo un efecto semejante a una sesión de DJ y cuyo objetivo es bailar sin interrupciones durante casi una hora.