Después de facturar un éxito como "Ojú", Aurora Power, Vicky G. Luna y Alba Molina, conocidas en conjunto como Las Niñas, debían demostrar que su propuesta podía ir más allá de las listas de éxitos. Un objetivo que compartían con otra de las partes fundamentales del proyecto, los productores Andreas Lutz (O'Funk'Illo) y Charlie Cepeda (Kiko Veneno). Estilísticamente, el disco sigue el camino iniciado en el debut del grupo y ahondan en la mezcla de estilos: hip hop, rhythm & blues, flamenco, toques "jazzys", etc. "Savia negra" es un trabajo donde se han visto implicados decenas de músicos, convirtiéndose en una obra de creación colectiva que tres grandes voces se encargan de interpretar.
La canción que da nombre al disco se convierte en un magnífico punto de partida e incluye un pasaje flamenco pensado por Manuel Molina y que interpreta Lole Montoya. Asimismo, su letra, escrita por Vikingo M.D. (Narco), reafirma su faceta más reivindicativa, en este caso con una vertiente ecológica. Pero temas tan universales como el amor, y el desamor, no podían faltar. Son la fuente de donde fluyen el ejercicio vocal de "Si tú ya no me quieres", el acercamiento al jazz de "Llueve", donde cuentan con la colaboración de la sección de metales de la Fundación Tony Manero o "No estoy hería".
Aurora, Vicky y Alba también saben cómo elevar la temperatura de los termómetros y se muestran insinuantes en la contundente y rockera "Superstar". Y, por si alguien pensaba que había algún estilo musical que se podía escapar, "Fuego" circula por el reggae y los sonidos hindús para culminar en el jungle.
Pero Las Niñas no pueden olvidar su origen andaluz y se atreven a hacer una reinterpretación de "La liebre", una sevillana corralera del guitarrista y cantaor lebrijano Pedro Peña Peña. El jaleo, elemento fundamental y característico de la fiesta gitana, corre a cargo de Los Delincuentes. El sabor flamenco, reconstruido a golpe de programaciones y scratch, se intuye en "Castillos y sueños", con letra de la propia Alba Molina. En definitiva, "Savia negra" es un buen combinado de estilos y, a la vez, un paso más en la consecución de un sonido propio.