Durante la última semana del mes de agosto de 2005, extensas zonas del sur y el centro de los Estados Unidos fueron azotados por el huracán Katrina. Dicen que tras la tempestad llega la calma. En el caso que nos ocupa, podríamos decir que tras la catástrofe llegó la solidaridad, aún más necesaria en el caso de los damnificados de este potente ciclón tropical para suplir la inacción de la administración central norteamericana.
La discográfica Nonesuch, en colaboración con la organización ecuménica cristiana Habitat for Humanity, ha puesto en circulación un disco benéfico que nos recuerda cuál es el gran legado de Nueva Orleáns, su música. Grupos e intérpretes de la zona, representantes de diferentes estilos, aportan canciones grabadas estrictamente para la ocasión. Los ingresos netos que genere este disco irán destinados a un objetivo concreto: reconstruir la tierra de los sueños que mencionaba aquel “Basin Street Blues”.
Allen Toussaint, un hombre que dejó bajo el agua su casa y todas sus pertenencias para poner su vida a salvo, responde al reto con optimismo en “Yes We Can Can” y “Tipitina and Me”, rememorando el estilo de Louis Moreau Gottschalk y del Professor Longhair. No menos legendario es el nombre de Mac Rebennack, conocido como Dr. John, quien acude al grito de auxilio con “World I Never Made”. Irma Thomas, la coronada como reina del soul de Nueva Orleáns, reinterpreta con maestría “Back Water Blues”, un clásico de 1927 escrito por Bessie Smith.
El acordeonista Buckwheat Zydeco y el guitarrista Ry Cooder recogen el legado criollo del sudoeste de Luisiana en “Cryin’ In The Streets”, ofreciendo su sentido homenaje a la conocida Bourbon Street. No podían faltar los grandes mitos, como las composiciones “Canal Street Blues” (interpretada al clarinete por Dr. Michael White) y “When The Saints Go Marching In”, con Eddie Bo al piano, que nos transportan a los principios del jazz.
Los veteranos Dirty Dozen Brass Band aseguran que, a pesar de su avanzada edad, sus pies no les pueden fallar en estos momentos. Aún así, esta recopilación pone en nuestras manos una música magnífica y una oportunidad de oro para mandarles energías extras.