Imperturbables al paso del tiempo y fieles a la periódica cita con sus incondicionales seguidores, Motorhead presentan Kiss Of Death, nueva grabación cuyo contenido se mantiene en consonancia con su trayectoria. Después de 30 años de trabajo y de 25 álbumes sobre sus espaldas, es difícil que nos sorprendan, pero poco probable que nos decepcionen.
La capa antioxidante que ha construido Lemmy a lo largo de su batallar por la supervivencia, ha colocado al grupo más allá del bien y del mal. La personalidad de la banda continúa definiéndose a base de composiciones de corte clásico pero de incuestionable efectividad. Curtidos en ofrecer rock fibroso y musculado, siempre encuentran recursos para no cansar las neuronas con la reincidencia.
El magnetismo vocal que destila Lemmy, conservado a base de lingotazos de Jack Daniels, y su creatividad para saber envejecer con orgullo, mantienen la integridad de la banda por encima de lo que puede ser tachado de inmovilismo; algo totalmente alejado de la realidad desde el momento en que suenan los primeros riffs del álbum.
Kiss Of Death es, posiblemente, el trabajo más metálico de los últimos años que ha grabado la mítica banda británica. Al carisma de Lemmy y su peculiar sentido del ritmo, se une el brillante trabajo a las guitarras de Phil Campbell, en un estado de forma sensacional, y la sólida y dinámica pegada de Mikkey Dee a la batería.
Cortes como Sucker, Under The Gun, Be My Baby, Going Down y Living In The Past, cuentan con un riff de perfil marcadamente metálico, afianzados por una coraza protectora que desprende altas cantidades de decibelios. Otros temas, manteniendo el mismo enfoque virulento, como One Night Stand, Devil I Know y Trigger, poseen estribillos de enganche inmediato, de los que penetran en el cerebro y quedan almacenados por tiempo indefinido.
No faltan, en este vitalista trabajo, los temas al clásico estilo rock and roll; ahí están, Christine o Sword Of Glory; mientras que God Was Never On Your Side, es una balada que sorprende por el esfuerzo de Lemmy por suavizar la tonalidad en algunas partes. Balada que, por otra parte, se aleja de cualquier estereotipo sensiblero.
Un álbum completo, que revitaliza la trayectoria de Motorhead y los coloca un peldaño más arriba en su ascenso al Olimpo de los dioses del rock.