El Caballero de la Muerte, la primera clase héroe; una nueva profesión: inscripción; la posibilidad de subir hasta el nivel 80 y considerables mejoras gráficas y de interfaz justifican la compra de Wrath of the Lich King. Su único pero: que está básicamente dirigido a los jugadores de niveles más altos.
Convertirse en un Caballero de la Muerte y disfrutar de la primera clase héroe en World of Warcraft bien vale un buen puñado de semanas jugando a este título para alcanzar el nivel 55. A partir de ahí, cualquier personaje de Azeroth, bien sea Horda o Alianza, podrá controlar y gozar de todos los poderes de este campeón de pasado oscuro. En su origen, el Caballero de la Muerte fue un guerrero que prestaba sus servicios al Rey Lich portando armas con poderes rúnicos para conseguir la inmortalidad. Finalmente, fue traicionado por el monarca, y ahora vende sus servicios indistintamente a un bando u otro en Azeroth.
Cuando este sombrío guerrero consiga ser lo suficientemente poderoso (nivel 68), emprenderá su viaje hacia el nuevo continente disponible en esta expansión: Rasganorte. Un territorio helado al norte de Azeroth de dimensiones abismales y que bien conocen los jugadores de Warcraft III. Allí esperan multitud de nuevas mazmorras, enemigos más peligrosos (especialmente no-muertos) y, sobre todo, un viejo conocido, Arthas, convertido en el Rey Lich.
Las misiones en Rasganorte son absolutamente distintas a todo lo visto hasta ahora en World of Warcraft. Cada una se integra mucho más en una zona concreta (evitando largas caminatas) y, además, casi todas ellas cuentan con una importante carga argumental. Así se irá narrando la apasionante historia del Rey Lich de una forma mucho más fluida y amena.
Asimismo, en Wrath of the Lich King se aumentan el nivel límite del 70 al 80, el número de talentos disponible en cada clase y el máximo de las profesiones. Y por si éstas no fueran suficientes, se incluye una nueva: inscripción. Con este oficio se podrán crear pergaminos y glifos que mejorarán considerablemente a nuestro personajes. Por supuesto, habrán también nuevas zonas RVR, campos de batalla y armas de asedio.
A todas estas novedades jugables hay que añadir otras tantas mejoras técnicas. Empezando por el renovado apartado gráfico, que muestra unos personajes y enemigos mucho más detallados y cuidados, al igual que un nuevo sistema de sombras. Esta expansión también cuenta con una nueva y potente banda sonora para el nuevo continente. Todo esto hace de Wrath of the Lich King la expansión que más de 11 millones de subscriptores llevaban esperando.