Deja de lado, aunque sea por un instante, la idea general que tienes sobre los videojuegos en general. Sean de la plataforma que sean. El título del que te vamos a hablar ahora poco tiene que ver con el resto de CDs que pueblan los estantes de la tienda. Para que te hagas una idea, piensa en Majestic, aquel ambicioso título de Electronic Arts en el que la realidad y la ficción se fusionaban. No se trataba de un juego normal y corriente. Su trama implicaba llamadas por teléfono y fax reales, envío de e-mails con pistas, etc. Todo esto iba enfocado a resolver un misterio que se iba descubriendo poco a poco. La idea era muy buena e innovadora, pero finalmente el proyecto fracasó a los 2 meses.
¿Y qué tiene esto que ver con In Memoriam? Pues que el concepto nos recuerda mucho al de Majestic por ese hecho de querer trasladar parte del juego a nuestra vida real, aunque en este caso no será tan exagerado como en aquella infructuosa tentativa. Ubi Soft nos ofrece una trama que deberemos resolver y en la que se ven implicados 2 periodistas de una agencia, desaparecidos desde hace varios meses, y posiblemente secuestrados por un asesino en serie que, al más puro estilo de las películas El silencio de los corderos o Seven, disfruta jugando con la policía, dando pistas para dejar que se le acerquen poco a poco.
La misma presentación ya intenta meternos en este mundo de misterio. Junto al CD de instalación viene otro negro, el que supuestamente ha enviado el asesino. De todos modos, cuando empieces a jugar todo será muy confuso. No es de extrañar, ya que todo es bastante peculiar. Para empezar, se te pedirá que des una dirección de correo electrónico real, a la que se te enviará una contraseña para que puedas empezar la partida. Luego se te pedirá el tipo de cliente de correo que utilizas. Es aconsejable tener un Outlook y similar, ya que a medida que vayamos jugando se nos irán enviando e-mails a nuestra cuenta desde la agencia SKL Network, a la que pertenecen Jack Lorski, apodado como “El polaco”, y Karen Gijman, su compañera.
La aventura empieza justo entonces. Ese CD-ROM que has introducido tiene la clave que desvelará el misterio de la desaparición de Jack y Karen, pero el asesino no te lo quiere poner fácil, y solo te irá dando pistas a medida que completas sus “juegos”. Estos, pueden ser pruebas de habilidad, puzzles o incluso claves o palabras específicas que tendrás que buscar por Internet. Y es que una de las características principales es precisamente esa dualidad de ficción en los momentos en los que juegas con el CD, y “realidad” cuando sales de él, mediante una interfaz que permite entrar y salir del juego en si fácilmente.
Algunas de las webs que se visitan son ficticias, pero han sido recreadas con mucha fidelidad y pasan perfectamente por reales, que también deberás visitar para encontrar pistas que te permitan avanzar en este oscuro caso. En total hay más de 300 webs relacionadas con la trama. Del mismo modo, recibirás correos electrónicos de personajes ficticios, y hasta tendrás una compañera virtual que te ayudará buscando información para ti y dándote pistas.
Según se dice, todo está basado en un hecho real, aunque no se especifica nada más de él.
Sobre el apartado de audio y vídeo del juego, poco hay que comentar, ya que In Memoriam es prácticamente todo jugabilidad. Casi todo el juego lo vamos a ver mediante una interfaz creada en Flash mediante la cual accederemos a las diversas pruebas que nos ha preparado el Fénix, que así se apoda el asesino que nos tiene en jaque. Cuando consigamos superar ciertas pruebas podremos ver fragmentos de vídeo con actores reales en formato Quicktime. Respecto al audio, poca cosa. Suelen haber efectos sonoros constantemente que ayudan a mantener esa atmósfera esotérica de misterio y de incertidumbre. Las voces que aparecen en los vídeos han sido dobladas al castellano, pero realmente no son nada del otro mundo.
¿Los puntos en contra? Bueno, realmente es original, pero su desarrollo, ritmo y dificultad pueden hacer que más de uno acabe tirándose de los pelos y atascado sin saber qué hacer a continuación. Evidentemente, esto es lo que quiere (¿o no?) el Fénix, ya que te manipula a su antojo, pero aún así puede llegar a ser desesperante. A pesar de todo, vale la pena para quien quiera escapar de lo tradicional en PC y probar una nueva experiencia. Eso sí, no es apto para impacientes ni gente que espere resultados instantáneos. Adelante los meticulosos y los que prefieran algo más pausado y tranquilo con un buen hilo argumental. Y no necesita un equipo potente...