Apoyado por el motor Unreal y cargado de humor, Larry vuelve a las andadas para ayudar a su tío en unas tareas en el estudio de cine. Además el plató está lleno de chicas guapas con las que ligar... ¡No necesitamos nada más!
Una vez más, Larry está de vuelta. No son pocas las entregas de esta serie que han visto la luz hasta ahora. Las iniciales en su día estuvieron protagonizadas por el tío del actual Larry Loveage, además de enmarcarse en un estilo totalmente distinto. Así, durante las seis primeras partes del juego, veíamos como Larry hacía de las suyas en una aventura gráfica pura y dura, en unos orígenes que se remontan al año 1987, si bien en 1991 se lanzó una reedición del mismo con mejoras en los gráficos y el sonido. El argumento es sobradamente conocido, las peripecias de un ligón sin solución que no hacía más que pensar en las mujeres y en como conquistarlas para llevárselas a la cama… Normalmente con bastante poco éxito. Gracias a su falta de vergüenza, a su vocabulario sin ningún tipo de pudor o a unos gráficos llenos de chicas ligeras de ropa, la franquicia llegó a tener un gran éxito consiguiendo que poca gente no supiera del protagonista, a lo que ayudaron sus numerosas secuelas.
Después de pasar un puñado de años sin noticias suyas, volvió a aparecer con la coletilla “Magna Cum Laude” hace unos pocos años. En dicha ocasión ya no estuvo apadrinado por su creador original y se cambió el estilo abandonando la aventura gráfica por algo más libre con una serie de misiones ambientadas en un campus universitario. Aunque el protagonista ahora era el sobrino del Mítico Larry, seguiría teniendo el mismo tipo de humor verde y resultó ser un producto entretenido que aportó unas cuantas horas amenas frente a la pantalla.
Ahora, en 2009, nos llega la última entrega en la que han optado por tomar un nuevo camino dirigido a incrementar todavía más la libertad en nuestros movimientos.
Aventura de cine
En esta ocasión visitaremos unos estudios cinematográficos para ayudar a nuestro tío a descubrir quién está intentando sacar sus trapos sucios con el propósito de hundirles. Durante nuestra estancia, se nos encargarán pequeños trabajos y estaremos a disposición de todos los empleados que requieran nuestros servicios.