Tras una vida presidiendo de forma exitosa a la gran Nintendo, se retira un gran hombre que deja un puesto marcado por su nombre, y que difícilmente podrá igualarse.
50 años son muchos, y en el videojuego lo son todo. Y en ese tiempo, Hiroshi Yamauchi ha estado al frente de la compañía que más tiempo lleva vendiendo firmeza, viendo como sus rivales han ido cambiando, como los tiempos han ido marcando cambios unas veces sorprendentes, otras díficilmente soportables, pero que en todo caso siempre han repercutido en el mayor crecimiento de una marca que vale su peso en oro.
Ahora su puesto queda en manos del director de la compañía, Satoru Iwata, quien tras demostrar su capacidad de liderazgo en el lanzamiento y supervisado de la GameCube y su catálogo, da el salto a un puesto donde siempre será recordado el inigualable hombre que ahora se retira.
Desde aquí, un sentido homenaje. Un paso más para la historia de Nintendo.