No son precisamente pocos los devotos de las aventuras de Zelda, y tienen sobrados argumentos para explicar el porqué de su opción. Con uno de sus juegos ubicados entre los mejores de la historia, vuelve a escena en la más grande y la más pequeña de Nintendo, para darnos más momentos mágicos e inolvidables.
Gameboy Color (sí, la GBC y no la Advance en la que todavía se impone la espera) y la futura Gamecube están más que de enhorabuena. La pequeña, recibe este mes de septiembre dos nuevas aventuras en sendos cartuchos que se inspiran directamente en la clásica versión de SNES. Programados sorprendentemente por Capcom (aunque bajo la estrecha supervisión de Nintendo), iban a ser parte de una trilogía si bien finalmente quedan reducidos a la citada parejita. Ambos capítulos -Zelda Oracle of Ages y Zelda Oracle of Seasons- gozan de gran independencia, si bien están interconectados por medio de passwords etc. que permitirán alteraciones si antes de jugar ya hemos finalizado el otro cartucho. Esto contesta a algunas especulaciones de que podía tratarse de una doble versión del mismo juego como se ha hecho con los afamados Pokemon.
Por otro lado, la última feria de Nintendo ha tenido como una de las estrellas la futura versión de Gamecube, causando estupor las imágenes ofrecidas en que se hace infantil la imagen de Link, otorgándole a la aventura un aire totalmente identificable con dibujos animados.
Siendo esta saga una de las que más glorias ha dado (en que el trono sigue indiscutiblemente ocupado por Occarina of Time) parece que no sólo está en plena forma, sino que aún le queda mucha guerra por dar.