Rocksteady ha pulsado la tecla correcta para crear una inigualable mezcla de acción, aventura e infiltración. La mejor versión de Batman demuestra por primera vez en una consola por qué es el detective más famoso del mundo y el Joker, el villano por antonomasia. Sus representaciones no tienen nada que envidiar a la de los cómics o el cine. Y la historia también está a la altura de los demás apartados de este videojuego casi perfecto en su género.
Si decidimos luchar, el conseguidísimo sistema de combates nos permitirá enlazar espectaculares combos siempre que apuntemos correctamente al enemigo debido y lo hagamos en el momento preciso. Los puños, piernas y capa son algunas de las armas que utilizará el hombre murciélago para acabar con los pandilleros del Joker de mil y una maneras distintas. Sin embargo, hay ocasiones en que los villanos tomarán rehenes o simplemente serán demasiados, incluso para nuestro héroe. Así que habrá que optar por la infiltración. Cual Solid Snake, el Caballero Oscuro se colará por los sitios más recónditos y se beneficiará de las sombras y cualquier rincón para ocultarse. Podrá también balancearse por el techo con su batarang y desde las alturas abordará y acabará con todos los ocupantes de las salas acolchadas.
Aunque Batman también se las verá cara a cara con enemigos de la talla de El Espantapájaros (especial mención a sus apariciones, realmente aterradoras) o Bane en combates realmente intensos, que en algunos pecan de repetitivos.
Metal Gear Batman
Más allá de la acción y la infiltración, la exploración e investigación también juegan un papel clave para avanzar en la búsqueda del Joker. En cada cuarto se esconde un secreto o un jeroglífico que el hombre murciélago deberá descifrar si quiere continuar con su empresa. Y son muchas las situaciones en las que tendrá que pensar. Puzzles y acertijos dejados por Enigma por todo Arkham que no serán fáciles de resolver. Así que recorrer cada cuarto acolchado del vasto manicomio, desde sus jardines hasta sus túneles -cualquiera se sorprenderá con el tamaño de este lugar- será absolutamente necesario para avanzar en el juego.
No hará falta echar horas para comprobar la calidad del argumento de este título. Se nota de principio a fin la mano de Paul Dini en los guiones y cómo todos los personajes se comportan como se esperaría de ellos. El movimiento de cámara hace cada escena de vídeo más espectacular que la anterior en un acercamiento muy estrecho al cine y sus técnicas. A todo esto ayuda, por supuesto, la calidad del apartado gráfico, impecable. Batman luce mejor que nunca y sus enemigos serán recordados también por su representación en este título. (Atención de nuevo con el Espantapájaros). De las alcantarillas, pasillos, calabozos y sendas de Arkham poco queda por decir, salvo que es difícil imaginarlas de forma más detallada y con una iluminación más realista. Todo el juego transcurre de noche, pero es que la forma en la que cada foco o lámpara proyectan su luz y sus sombras sobre el entorno y los personajes es de alabar.