Algo tendrá el agua cuando la bendicen. O las secuelas cuando se compran en cifras de vértigo. Puede que esta tendencia de las marcas a asegurar producción acabe en cansancio antes o después, pero de momento la encuesta formalizada por Nielsen viene a confirmar lo evidente: los más de 4800 jugadores de entre 7 a 54 años que participaron, querían más de lo mismo. En concreto, más Halo, más Call of Duty, y más Just Dance.
Algún lector percibirá que pocas encuestas hacían falta cuando el medidor más fiable sea el de ventas anuales o los listados de lanzamientos. En todo caso algo de margen para títulos sin secuelas dejan The Last Story o Everyone Sing. Un mínimo reconocimiento para los nuevos lanzamientos que deberían reforzarse por otra idea: si la industria quiere seguir teniendo franquicias potentes que vendan muchas sagas... lo mejor es seguir buscando nuevos títulos para cuando los nombres actuales terminen agotando.