Avatar como videojuego no ha sido algo puntual en la carrera de James Cameron, y ni mucho menos una mera forma de limitarse a explotar su creación más ambiciosa en el cine. Sus planes en el videojuego son serios, y así lo detalla en una reciente entrevista a X-Play.
"Tengo muchas historias y no tengo suficiente tiempo para convertirlas a todas en cine" es su argumento principal. De esta manera, desde el videojuego podría ir dando rienda suelta a todas aquellas que queden descartadas de su planificación como director de cine, aunque en el hecho de que opte por esa vía de forma aislada, en lugar de ceder esas historias a otros directores, parece esconderse la rentabilidad del videojuego como sector.
En cualquier caso, su relación con Ubi Soft, sellada para Avatar, puede ser una pieza clave en esta nueva forma de trabajo: "estoy explorando la idea con Ubi para ver si podemos explotar todas esas ideas como videojuegos independientes del cine" declaraba sobre la compañía.
Muchos apuntan que, de fructificar este fortalecimiento de la relación entre ambas partes, podría llegarse a una situación similar a la que une a Ubi Soft con Tom Clancy, con quien existe un acuerdo para usar su firma como marca para explotar el universo de sus creaciones.